¿QUÉ VINO COMBINA CON QUÉ?
¿Le gusta el vino? ¿Pero a veces se siente inseguro con tantas variedades diferentes? ¿Cómo se reconoce un buen vino? ¿Qué vino combina con qué comida? Nuestra pequeña guía de vinos le ayuda a elegir el vino adecuado y le ofrece valiosos consejos.
¿QUÉ ES EL VINO?
El vino (del latín: vinum) es una bebida alcohólica obtenida del zumo fermentado de las uvas o del mosto de uva. Estas bayas crecen en los racimos de la vid. El vino se cuenta entre los bienes culturales más antiguos de la humanidad. Ya en el 6º milenio a.C. se practicaba la viticultura en Asia Menor. Tanto el arte de la elaboración del vino como la cultura del disfrute del vino han evolucionado continuamente durante milenios hasta el día de hoy.
El mundo del vino nos ofrece hoy en día una gran variedad. Los vinos se diferencian por muchos factores y, no en última instancia, también por el precio. Profundizar en estas diferencias, captar los sabores, filosofar con otros aficionados sobre la cultura del vino o simplemente disfrutar, todo esto constituye la fascinación en torno al tema del vino.
Las variedades de uva más populares del mundo
VINOS TINTOS
Burgunder
Burgunder es un término colectivo para vinos de Borgoña. La variedad roja más conocida es el Spätburgunder o Pinot Noir. Los vinos de Spätburgunder tienen un sabor pleno y aterciopelado, con un aroma afrutado y matices de almendra. El típico Spätburgunder tiene un aroma ligeramente dulce a frutas rojas, desde fresa y cereza hasta mora y grosella negra. Los vinos tintos de Spätburgunder son ideales para la temporada más fría. Se beben a una temperatura de 16-18 °C. Las variantes más robustas acompañan mejor asados y caza, o incluso una tabla de quesos.
Merlot
El Merlot es una de las variedades de vino tinto más cultivadas en todo el mundo. Ya se cultivaba en el siglo XVIII. Los vinos, bastante oscuros, recuerdan al sabor de las ciruelas y tienen un gusto suave y sedoso. A veces, se elaboran como vinos varietales y, en ocasiones, se mezclan con otras variedades tintas en barricas de roble. Los vinos de barrica acompañan adecuadamente platos contundentes, mientras que un Merlot sencillo es adecuado para platos más ligeros o simplemente para disfrutar solo.
Cabernet Sauvignon
Esta variedad se cuenta entre las más conocidas del mundo. Sus uvas contienen una gran cantidad de pepitas, colorantes y taninos, lo que le da al vino un color muy oscuro y lo hace excelente para su envejecimiento en barrica y almacenamiento a largo plazo. Los vinos de Cabernet Sauvignon tienen un gran carácter y presentan el sabor típico de grosellas negras (cassis) y un aroma a pimiento verde. Una peculiaridad de esta variedad es que, incluso bajo diferentes condiciones climáticas y de suelo, el bouquet y el sabor del vino siguen siendo inconfundibles. Como acompañante de menús, el Cabernet Sauvignon es excelente para carnes de res o cordero asadas con salsas oscuras.
Bordeaux
Los Bordeaux son vinos que provienen de la región vinícola francesa del mismo nombre. Bordeaux no es una variedad de uva, sino una mezcla (también llamada coupage) de diferentes variedades como Merlot, Cabernet Sauvignon y Sauvignon Franc. La dirección del sabor se ve influenciada por la proporción de cada variedad de uva y por el tipo de barrica en la que se almacena el vino. La mayoría de los vinos de Bordeaux tienen un sabor potente y un color oscuro y profundo.
Vinos blancos
Riesling
Los vinos Riesling están disponibles en todas las categorías de calidad y gustos. En parte, su crianza se realiza en barricas de roble tradicionales. El Riesling "típico" muestra un color amarillo pálido, tendiendo hacia el verdoso, con un aroma dominado por el melocotón o la manzana, y en boca se percibe una acidez vigorosa. En los Rieslings de suelos de esquisto se habla de un tono mineral, algunos vinos huelen a pedernal, mientras que los ejemplares envejecidos a menudo presentan un interesante tono petrolífero. Los vinos Riesling deben beberse como mínimo un año después de la cosecha, muchos alcanzan su óptimo momento de consumo después de algunos años. La capacidad de envejecimiento de los vinos de alta calidad es prácticamente ilimitada. Los Rieslings jóvenes y ligeros, ya sean secos o dulces según el gusto, son vinos de verano ideales. Los Rieslings maduros son más adecuados como acompañantes de comida. Los Rieslings secos a semisecos combinan especialmente bien con platos ligeros, pescado de agua dulce y mar, carne cocida con salsas claras y aves de corral pequeñas.
Chardonnay
El Chardonnay es una de las variedades de uva más populares del mundo. Está presente en prácticamente todos los países productores de vino y ocupa una superficie de cultivo a nivel mundial casi equivalente a la del Riesling. La mayoría de los vinos se elaboran en seco. Además de la crianza en tanques de acero inoxidable, la crianza en barrica es muy común con esta variedad. El aroma a melones, frutas exóticas, grosellas maduras o incluso manzanas no del todo maduras es típico del Chardonnay. Las calidades superiores suelen tener abundante alcohol y extracto, son corpóreos y persistentes. Si se crían en barrica, los aromas a madera complementan los aromas frutales primarios. Los vinos ligeros y jóvenes combinan bien con pescado y marisco, mientras que los vinos robustos o con notas de madera se adaptan tanto a platos asados como a quesos contundentes.se.
Weißer Burgunder
El Weißer Burgunder está presente no solo en nuestro país, sino también en nuestros vecinos. En Francia, la variedad se llama Pinot Blanc, en Italia Pinot Bianco, y también en Austria, Suiza o Eslovenia la variedad es común. El Weißer Burgunder se presenta en la copa con un color amarillo pálido a claro, con un aroma delicado y reservado. Su característico aroma ligeramente a nuez. El Weißer Burgunder no es excesivamente alcohólico y tiene un aroma sutil, que a menudo recuerda a nueces verdes, manzana, pera, membrillo, albaricoque, cítricos o piña fresca. Un cuerpo moderado y una acidez refrescante lo convierten en un vino de mesa versátil. Es adecuado para mariscos, pescado, carne de ternera y cerdo, así como aves de corral, o simplemente como un vino de terraza bien refrigerado. Variantes más ricas en extracto y vinos de barrica también se adaptan bien al cordero o platos delicados de caza joven.
Sauvignon Blanc
El Sauvignon Blanc ha emprendido un triunfo alrededor del mundo en las últimas décadas. Los vinos Sauvignon Blanc alemanes han sorprendido con muy buenas calificaciones en catas internacionales. La característica distintiva del Sauvignon Blanc es su fuerte aroma a hierba, hierbas, grosellas y frutas verdes. Combina perfectamente con platos de pescado y mariscos, o incluso con pasta en salsas cremosas.
La combinación de comida y vino
Aún hoy en día, muchas personas abren una botella de vino blanco para lo que llaman "carne blanca" y un vino tinto para la "carne oscura". Simplificando, esto no está mal, pero se ignoran factores decisivos de un plato como la salsa, las verduras, las especias y, por último pero no menos importante, el método de preparación. Pero son precisamente estos aspectos los que aportan los impulsos atractivos en la cocina moderna. Los estilos de cocina y las recetas se vuelven cada vez más internacionales y variados, con continuas nuevas tendencias y experiencias. Por lo tanto, hoy en día ya no deberíamos aferrarnos a reglas fijas.
¡El sabor es lo que importa!
Y la audacia para experimentar a menudo se recompensa con un placer inesperado. La correcta combinación de vino y comida es sorprendentemente sencilla. Todos los platos tienen un perfil de sabor, al igual que el vino. Sin entrar demasiado en los fundamentos teóricos, la regla general es: el vino se combina con la comida cuando los dos perfiles de sabor coinciden.
Consejos
La acidez necesita acidez
Una ensalada con vinagreta hará que un fino Viognier blanco parezca dulce, plano y aburrido. En cambio, un Sauvignon Blanc con fuerte énfasis en la acidez se adapta perfectamente."
Dulzura necesita dulzura
Esto se aplica a los postres así como a otros platos con un componente dulce. Un plato de pescado en una salsa blanca con crema, zanahorias y patatas cocidas es muy dulce y sustancioso. Por lo tanto, un Chardonnay de una región más cálida sería una buena opción.
La tanicidad necesita grasa
Los platos grasosos dejan una fina capa de grasa en la boca y la garganta. Esta capa bloquea la tanicidad, que a menudo causa la sensación de boca seca. Desde la perspectiva culinaria, esto significa que los vinos con taninos, debido a su estructura firme, combinan perfectamente con platos suaves y sustanciosos.
Sabor necesita dulzura o acidez
Los platos picantes adormecen las papilas gustativas en la boca. Por lo tanto, se necesita un vino con más expresión, estructura y poca acidez. Los vinos blancos semidulces son una buena opción. La carne de res a la parrilla con una salsa picante y condimentada necesita un vino tinto fuerte y rico en taninos. El pollo agridulce y especiado necesita un vino blanco dulce como acompañamiento.
Vinos complejos
Los vinos complejos necesitan platos simples y los platos complejos necesitan vinos simples. El cerebro tiene dificultades para concentrarse en varias cosas al mismo tiempo. Se debe prestar toda la atención a un vino grande y complejo (generalmente también caro).
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