Sin embargo, hay un efecto secundario indeseable: Al limpiar los cuchillos, la superficie de plástico puede volverse gris o desprenderse. Esto no es peligroso ni antihigiénico, pero desgraciadamente es antiestético. Sin embargo, se puede eliminar fácilmente la neblina gris frotando los mangos de los cuchillos con una gota de aceite de cocina si es necesario. Tras su cuidado, el mango del cuchillo recupera su aspecto negro y brillante. Si dedica algo de tiempo a cuidar sus cuchillos con esmero, los disfrutará durante más tiempo. Lo que también favorece esto, por cierto, es un afilado adecuado.